Exportaciones de soya y derivados caen en más de $us 520 millones al tercer trimestre, según el INE

Las exportaciones de soya y sus derivados registraron una disminución de $us 522,4 millones al cierre del tercer trimestre de 2024, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Esta caída refleja un contexto complejo para el sector agroindustrial, que enfrenta no solo una reducción en la producción por sequía, sino también la falta de insumos clave como el diésel, necesario para finalizar la cosecha de invierno y avanzar en la siembra de verano 2024-2025.

Caída de las exportaciones de soya y derivados

El valor de las exportaciones de semillas y habas de soya experimentó una drástica reducción del 62,6%, pasando de $us 192,5 millones entre enero y septiembre de 2023 a solo $us 72,1 millones en el mismo periodo de este año, lo que implica una disminución de $us 120,4 millones.

Por su parte, los productos derivados de la soya, como aceites y harinas, también registraron una significativa caída del 33,3%. Entre enero y septiembre de 2024, las exportaciones alcanzaron $us 806,3 millones, frente a los $us 1.208,3 millones reportados en el mismo periodo del año anterior, lo que representa una disminución de $us 402 millones.

En total, entre granos y derivados, el sector dejó de generar $us 522,4 millones en ingresos durante el periodo analizado.

Desafíos críticos para el sector oleaginoso

El sector enfrenta dificultades adicionales debido a la falta de materia prima. Según la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), la sequía ha reducido la producción en más de 800.000 toneladas este año. A esto se suma la escasez de diésel, que amenaza con retrasar la cosecha de invierno (400.000 hectáreas) y comprometer la siembra de 1,3 millones de hectáreas previstas para la campaña de verano 2024-2025.

El ministro de Hidrocarburos, Alejandro Gallardo, anunció recientemente la distribución de 2,7 millones de litros de diésel para apoyar al sector productivo, aunque los productores esperan que este compromiso se cumpla de manera efectiva.

Impacto en la agroindustria cruceña

La Cámara de Industrias Oleaginosas de Bolivia (Caniob) también advirtió sobre las consecuencias de la falta de grano de soya. Jorge Amantegui, presidente de la institución, señaló que varias agroindustrias en Santa Cruz han tenido que detener operaciones, lo que pone en riesgo las exportaciones y afecta directamente la economía local.

“No hay grano para procesar; actualmente las industrias están paralizadas. Lo único que hacemos es abastecer el mercado interno gracias a los stocks disponibles, en cumplimiento de nuestro compromiso con el Gobierno”, indicó Amantegui en una entrevista con Canal Rural.

El panorama actual evidencia la necesidad urgente de soluciones estructurales que garanticen el suministro de insumos y fomenten la resiliencia del sector frente a eventos climáticos adversos. Sin estas medidas, la sostenibilidad de la agroindustria y las exportaciones bolivianas de soya podrían enfrentar mayores desafíos en el futuro inmediato.