La marcha evista tiene planeado ingresar este lunes a la sede de Gobierno, y el alcalde Iván Arias ha expresado que los manifestantes tienen el derecho a movilizarse. Sin embargo, instó a evitar actos de violencia y vandalismo que puedan perjudicar a la ciudadanía y al mobiliario urbano a cargo de la municipalidad.

"Bienvenidos, pero por favor no destruyan la ciudad, no la quemen y eviten cualquier acto de violencia", fue el mensaje que lanzó la autoridad en relación a esta movilización, que ya ha sido escenario de algunos episodios violentos en días recientes.

Según los organizadores del evismo, la marcha busca denunciar al gobierno de Luis Arce, acusándolo de utilizar los poderes Judicial y Electoral para obstaculizar la candidatura de Morales en las elecciones de agosto de 2025. También critican la crisis económica que se refleja en la escasez de dólares y combustibles.

“Vienen con el lema de ‘salvar Bolivia’, pero esperamos que eso no se traduzca en incendiar La Paz”, comentó el alcalde, quien también advirtió que se prohíbe el acceso a la plaza San Francisco debido a que 60 trabajadores están realizando labores de refacción en la zona.

Debido a estas obras, se han desviado otras marchas y protestas, y se han retirado escombros para evitar que se conviertan en “armas contundentes” durante el avance de los manifestantes.

La semana pasada, Iván Arias sugirió que, en lugar de confrontar a la marcha evista, se la reciba con banderas blancas y se les pregunte sobre sus propuestas en favor del país, teniendo en cuenta que los movilizados también abordan la situación económica actual.

Por el momento, no hay indicios de un diálogo entre el Gobierno y los marchistas, quienes son liderados por el máximo dirigente del masismo, Juan Evo Morales, a pesar de que se ha hecho una convocatoria. La tensión en La Paz persiste mientras se espera el desenlace de los acontecimientos en las próximas horas.