El rapero argentino L-Gante irá a juicio por privación ilegal de la libertad y amenazas
Uno de los raperos más populares de Argentina, Elián Valenzuela, irá a juicio por privación ilegal de la libertad, amenazas y encubrimiento agravado. El músico, conocido como L-Gante, está acusado de haber amenazado con un arma y secuestrado a un hombre y una mujer tras una pelea en una discoteca a finales de mayo. Valenzuela, que había entrado en prisión preventiva en junio, fue liberado en septiembre.
El cantante de 23 años fue denunciado a fines de mayo por uno de sus antiguos vecinos del municipio de General Rodríguez, en la periferia oeste de la ciudad de Buenos Aires. El hombre, Gastón Torres, aseguró que el rapero lo había apuntado con un arma y lo había obligado a subirse a su coche durante la madrugada después de una pelea. Según el relato del denunciante, el músico lo mantuvo secuestrado durante casi media hora.
El juez ha dispuesto ahora que L-Gante sea juzgado por el delito de “amenazas simples en concurso real con privación de la libertad en concurso ideal con amenazas coactivas” respecto de Gastón Torres, por “privación ilegítima de la libertad simple en concurso ideal con amenazas simples” de Catalina Passi y por “encubrimiento agravado por el ánimo de lucro”, según informa la agencia de noticias Télam, que tuvo acceso al fallo. El magistrado sobreseyó a Valenzuela parcialmente por el delito de “tenencia simple de estupefacientes” por considerar que la droga que tenía consigo era para “consumo personal”.
El magistrado que ha ordenado la elevación a juicio, Gabriel Castro, es el mismo que en septiembre autorizó la excarcelación del rapero. Ese fallo fue recurrido y la Cámara revocó la decisión de Castro, pero el juez rechazó volver a detener al músico, como solicitaban la fiscalía y el particular damnificado. Tras su liberación, el rapero contó a los medios: “Este tiempo que estuve acá lo aproveché para endurecerme mentalmente y cuidarme un poco más, no dar oportunidades a las cosas malas y meterle con todo a lo que me gusta”.
Exponente de la nueva cumbia argentina, el cantante protagonizó en marzo de 2021 la sesión #38 del productor argentino Bizarrap. Su popularidad siguió creciendo cuando la vicepresidenta argentina, Cristina Kirchner, se refirió a él meses después, en julio. En un acto en una escuela de Buenos Aires, Kirchner habló de una entrevista en la que el músico contaba que había grabado y editado su primer éxito viral en uno de los ordenadores repartidos por el Estado en las escuelas públicas. “Él dice que, con esa [computadora de] Conectar Igualdad que recibió en 2014 y un microfonito hizo un tema que hoy tiene 176 millones de reproducciones en YouTube”, dijo Kirchner y recomndó a los jóvenes la música de “Élegant”, como lo llamó.
Meses después, en octubre, lo recibió el presidente del país, Alberto Fernández. En diciembre se mudó a un barrio privado con su novia y su hija, y seis meses después fue detenido. Sus fans se movilizaron a las afueras del centro de detención y sus abogados denunciaron que la policía estaba ensañada con el cantante. Pero no era la primera vez que tenía problemas con la justicia. En marzo de 2021 había sido detenido por disturbios en la vía pública y en febrero de 2022 por otra intimidación a un joven con un arma de fuego.
El País