El Ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda de Bolivia, Edgar Montaño, rechaza categóricamente una nueva denuncia de narcovuelo presentada por legisladores del partido Creemos. Frente a estas acusaciones, Montaño afirmó en entrevista con Panamericana que "sin pruebas, agarraron la nómina de pasajeros y dijeron que supuestamente se dio este ilícito". 

El ministro recordó a la oposición que Bolivia está comprometida a cumplir el convenio de Chicago, el cual establece que el país es miembro de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI). Además, señaló que la ley 2902 regula la aviación en Bolivia y certifica la permanencia del país en esta organización, lo que implica que los aeropuertos deben recibir a todas las aeronaves y no pueden negarles su uso. 

Montaño afirmó que las autoridades de Migración, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN), la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) y la Aduana cumplieron con su trabajo en este caso. El avión provenía de África con un total de 8 personas a bordo, incluyendo 5 pasajeros y 3 tripulantes. Al día siguiente, al momento de la partida, solo se registraron 7 personas, 4 pasajeros y 3 tripulantes. La persona que faltaba era una pasajera boliviana, según los datos proporcionados por Montaño. 

Sin embargo, legisladores de Creemos habían advertido previamente que este caso era sospechoso, ya que habían llegado 5 pasajeros y al día siguiente se había registrado un pasajero adicional para el vuelo de regreso a Guinea. Estas denuncias se suman a la controversia en torno al incidente.