Shakira lanza «Las mujeres ya no lloran», su nuevo disco para facturar
Del estribillo «las mujeres ya no lloran, las mujeres
facturan» ha pasado ya un año repleto de éxitos para Shakira (Barranquilla,
Colombia, 47 años). Esa frase supuso un sonado regreso a la primera línea de la
industria musical aliándose con Bizarrap en la Music Session Vol. 53 del
disyóquey y productor argentino. De paso resumía todo el odio (después del
amor) que sentía por su expareja y padre de sus dos hijos (Milan y Sasha), el
empresario y exfutbolista Gerard Piqué. Véase una forma de poner tierra por medio
entre ambos antes incluso de su marcha a Miami desde Barcelona. Como colofón,
empezaba a ingresar dinero en sus cuentas, mermadas en los últimos tiempos por
sucesivos juicios en los que la Agencia Tributaria la acusa de evasión fiscal.
El 12º álbum de estudio de Shakira Isabel Mebarak Ripoll se
publicará el próximo 22 de marzo. Su título, Las mujeres ya no lloran, sigue
una línea continuista en su estrategia de incidir en letras de tinte
autobiográfico en las que ha vencido al desamor y ha rehecho su vida como una
curranta. No es nada nuevo. Y no solo ocurrió desde su ruptura con Piqué en el
featuring con Bizarrap. La fórmula de corazón roto despechao fue similar con
Ozuna en Monotonía (no fue culpa tuya, ni tampoco mía), con Rauw Alejandro en
Te Felicito (qué bien actúas, de eso no me cabe duda) o en el caso de Copa
Vacía con Manuel Turizo (tus besos son de agua salada, bebo y no me calma
nada). En la publicación con la que ha anunciado el nuevo trabajo insiste en
este carácter personal de la artista con su obra: «Al escribir cada canción, me
reconstruí a mí misma. Al cantar, mis lágrimas se transformaron en diamantes y
mi vulnerabilidad en resiliencia». En efecto, la fotografía del llanto
convertido en joyas no puede simbolizar mejor el cómo ha rentabilizado
económicamente el desamor.