Sophia Loren sopla 90 velas como monumento eterno del cine

Las celebraciones por el cumpleaños llegarán al público de varios puntos del planeta, con exposiciones y otros eventos desde Nápoles a Nueva York o Los Ángeles, aunque ella lo celebrará con una fiesta privada en “su” Roma, rodeada de su familia y amigos más queridos.

La ‘Señora’ cumple 90 años como un recuerdo vivo de los Años de Oro del cine, pero también como símbolo de elegancia y sentido del humor. “Yo pienso en todo menos en la muerte”, respondía riendo en una reciente entrevista al diario La Repubblica.

Sofia Costanza Brigida Villani Scicolone nació el 20 de septiembre de 1934 en una Roma que pronto cambiaría por la periferia napolitana debido a las estrecheces de la ausencia paterna.

De nuevo en Nápoles

Sin embargo, la ciudad de la ‘Dolce Vita’ volvería a acogerla en su juventud, cuando regresó con su madre en busca de éxito en los concursos de belleza. El encuentro en uno de ellos con un poderoso productor, Carlo Ponti, 22 años mayor que ella y casado, cambiaría su vida para siempre.

Con él se casaría esquivando una acusación de bigamia y tendría sus dos hijos, Carlo y Edoardo. Pero también la ayudaría a entrar en el efervescente cine de la posguerra, bautizándola acertadamente con un ‘Sophia’ mucho más internacional.

La actriz enseguida saboreó el éxito con el cineasta de su vida, Vittorio De Sica, bailando aquel ‘Mambo italiano’ en ‘Pane, amore e…’ (1955), parte de una saga adorada previamente protagonizada por Gina Lollobrigida, con quien siempre fue comparada.

En esos años conoció en el set de ‘Peccato che sia una cannaglia’ (1954) a un actor a quien quedaría unida para siempre en el imaginario colectivo: Marcello Mastroianni.