La protesta, liderada por las federaciones de la provincia Omasuyos, donde se encuentran los Ponchos Rojos, ha ganado apoyo de otras centrales campesinas de la provincia Los Andes.

Por tercer día consecutivo, una facción de la Federación de Campesinos Túpac Katari mantiene bloqueada la carretera que conecta con el lago Titicaca y Copacabana, en el departamento de La Paz. Se han reportado al menos diez puntos de bloqueo, donde los manifestantes han colocado montículos de tierra, escombros y neumáticos en desuso para impedir el paso de vehículos.

Los campesinos exigen la renuncia del presidente Luis Arce y han ratificado que su medida de presión es indefinida. La protesta, además de ser impulsada por las federaciones de Omasuyos, cuenta con el respaldo de otras organizaciones de la provincia Los Andes.

Los principales perjudicados por los bloqueos son los productores de la región, quienes no han podido transportar sus productos. Los comerciantes de pescado, provenientes del lago, han optado por utilizar rutas alternas, incluso lacustres, para llegar a la carretera que conecta con Desaguadero y así poder llevar su mercancía a El Alto y La Paz. Sin embargo, los productores de legumbres, hortalizas y tubérculos no han logrado movilizar su producción.

Aunque la Policía ha llegado hasta la tranca de Corapata, hasta el momento no ha intervenido en la protesta.

Otro de los reclamos de los manifestantes es la “devolución” de su sede central, ubicada en la zona de San Pedro, en la ciudad de La Paz. Dos facciones se disputan el control de estas oficinas: una liderada por David Mamani, quien encabezó la violenta protesta, y otra encabezada por Javier Alejo, que apoya al gobierno de Luis Arce.