Un bochorno internacional; Noboa inauguró en Ecuador la Cumbre Iberoamericana sin los presidentes de la región
Ecuador acoge este jueves y viernes, en la ciudad de Cuenca,
una cumbre iberoamericana marcada por la ausencia de todos los grandes líderes
regionales, aunque con la presencia del rey Felipe VI. El evento no ha logrado
convocar ni a uno solo de los presidentes latinoamericanos, ni siquiera los que
habían confirmado su presencia hace unas semanas. El anfitrión, el presidente
Daniel Noboa, se ganó la enemistad de muchos de ellos tras el asalto a la
embajada mexicana en Quito, una violación del derecho internacional de la que
se tienen pocos precedentes. Además, se certifica así que esta cumbre, creada
en 1991 para reforzar los vínculos entre Latinoamérica y España, ha ido perdiendo
peso con el paso de los años.
Felipe VI ha sido la principal personalidad del evento, al
que no ha acudido el presidente español, Pedro Sánchez, por estar en Bakú, en
la Cumbre del Clima —en su lugar ha estado el ministro de relaciones
exteriores, José Manuel Albares—. El colombiano Gustavo Petro se ha encontrado
con un panorama similar en una de las regiones del país, el Chocó, a lo que se
suma la escasa simpatía que Noboa y él se profesan. La participación de Claudia
Sheinbaum, Nicolás Maduro y Daniel Ortega no entraba en ninguna quiniela
—Venezuela, México y Nicaragua han roto relaciones con Ecuador—.
Sorprenden más las espantadas de Nayib Bukele, presidente de
El Salvador, y Javier Milei, de Argentina, que se pueden sentir más cercanos
ideológicamente a Noboa, que en breve dimitirá para hacer campaña para las
elecciones presidenciales que se celebrarán en febrero. Milei prefirió irse a
una cumbre de conservadores en Estados Unidos, mientras que Bukele no ha
ofrecido ninguna explicación —mandó en su nombre al vicepresidente, Félix
Ulloa—. Podría tratarse de un efecto dominó ―pocos quieren fotografiarse en una
cumbre fracasada— o que se molestó por un reportaje en el New Yorker, firmado
por Jon Lee Anderson, en el que Noboa calificaba a Bukele de “arrogante” y
minimizaba su importancia por el tamaño del país que dirige, similar al de
algunas regiones ecuatorianas.
La Cumbre Iberoamericana, en su edición número 29, ha
coincidido con la del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que
se celebra en Lima. En ella se encontrarán el sábado el presidente de Estados
Unidos, Joe Biden, con el mandatario chino, Xi Jinping. La presidente peruana,
Dina Boluarte, y el chileno Gabriel Boric han preferido estar presente en esa
que en la ecuatoriana. Si se tiene en cuenta que en la anterior Cumbre
Iberoamericana, celebrada en República Dominicana, participaron 16 jefes de
Estado, esta ha contado con poca presencia de mandatarios.