Tres individuos fueron detenidos por causar disturbios durante el congreso del MAS en El Alto, y las sospechas recaen sobre Quintana, Alanoca y Dockweiler, según el reporte de Del Castillo. Alanoca, en respuesta, negó su implicación en cualquier acto violento, acusando en su lugar al ministro de Gobierno de recurrir al "terrorismo de Estado". Evo Morales, por su parte, equiparó las tácticas del gobierno con las de Arturo Murillo.

Del Castillo anunció la detención de tres personas durante el congreso del MAS, especificando que agredieron a una mujer de pollera. Según él, los teléfonos de los detenidos contenían conversaciones con Quintana, Dockweiler y Alanoca.

Alanoca rechazó las acusaciones del ministro, defendiendo su derecho a protestar y calificando las acusaciones como intentos de promover el terrorismo de Estado. También reafirmó su compromiso con diversas causas, desde el control del litio hasta la defensa de los derechos del pueblo boliviano.

Evo Morales criticó al gobierno por su supuesta represión, equiparando sus tácticas con las del exministro Arturo Murillo y expresando solidaridad con los afectados.