El café y sus efectos en nuestra salud por el consumo diario
Sobre
el consumo de café, existen todo tipo de juicios de valor, basados o no en la
ciencia. La cafeína, desde luego, es un estimulante que pone en marcha el
cerebro desde la ingesta mañanera, tan necesaria para mucha gente, que incluso
bromea con aquello de “hasta después de mi primer café, ni hablo ni quiero que
me hablen”. El abuso, como ocurre con cualquier sustancia beneficiosa a priori,
puede traer problemas, sobre todo en el aspecto de elevar la presión sanguínea.
El
café es muy bueno a la hora de mejorar la función cognitiva, y eso tiene
razones químicas y biológicas. La cafeína es un bloqueante de la adenosina,
neurotransmisor que induce el sueño; a resultas de ese bloqueo, se produce un
aumento de otros neurotransmisores, como la dopamina; la persona tiene la
cabeza más despejada y se siente menos cansada.
De la
reducción de riesgo de desarrollar Parkinson a prevenir la depresión
Hay
más razones para tomar café. Un estudio publicado en Practical Neurology cifra
en el 25% la reducción de riesgo de desarrollar Parkinson entre los bebedores
habituales de café, y el beneficio se extiende igualmente a una deceleración
del deterioro cognitivo, gracias a su elevado poder antioxidante. Según dice el
estudio, el consumo de cafeína durante toda la vida no parece influir en la
aparición de convulsiones. Por lo tanto, la ingesta diaria de café y cafeína
puede ser parte de una dieta sana y equilibrada; no es necesario suspender su
consumo en las personas mayores. Otro estudio, en este caso de la Universidad
de Singapur, apunta el detalle de que este beneficio es aún mayor para las
personas de razas asiáticas.
Por si
fuera poco, tomar café con regularidad también colabora a prevenir la cirrosis,
el cáncer de hígado, las enfermedades cardiovasculares e incluso la depresión.
En cuanto al azúcar en sangre, también ayuda a su control, especialmente en
pacientes de alto riesgo para el desarrollo de la diabetes tipo 2 (no genética)
ya que según Frank Hu, nutricionista de la Escuela de Salud Pública Harvard, el
café tiene compuestos bioactivos que mejoran la sensibilidad a la insulina.
La
prestigiosa Clínica Mayo afirma que las investigaciones más recientes sugieren
que en realidad puede tener beneficios para la salud y señala que las primeras
investigaciones sobre el consumo de esta bebida no siempre tenían en cuenta que
los grandes bebedores de café también tendían a consumir tabaco y a ser
sedentarios. Mayo también concluye que los estudios más recientes explican que
la bebida puede ofrecer alguna protección contra la enfermedad de Parkinson,
diabetes tipo 2, enfermedad hepática, incluido el cáncer de hígado, ataque al
corazón y accidente cerebrovascular.
¿Cuántas
tazas de café se puede tomar cada día?
En
cuanto al consumo correcto, y según la Food & Drug Administration de
Estados Unidos (institución que regula el universo nutricional del país) dice
que no pasar de cuatro o cinco tazas de café diarias es una cantidad razonable,
con las lógicas restricciones para grupos de riesgo como embarazadas, personas
que padecen de insomnio o que tengan la presión alta.