Escasez de agua en Canal de Panamá: desafíos para el comercio mundial
Las recientes limitaciones han forzado a los barcos a optar por trayectos más largos y onerosos o a esperar hasta tres semanas para atravesar el canal.
La disminución del nivel del agua en el canal de Panamá está generando trastornos en el comercio global, obligando a los transportistas a tomar rutas prolongadas y afrontar costos de fletes más elevados, según informó Reuters el lunes.
La severa sequía ha originado una escasez de agua necesaria para el funcionamiento de las esclusas, lo que ha llevado a la Autoridad del Canal de Panamá a restringir el tráfico marítimo durante este otoño. En la actualidad, solo se permite el paso de 22 buques diariamente, en contraste con los 35 habituales en condiciones normales. Este número se reducirá a 18 al día a partir de febrero.
Las plazas disponibles para reservar están siendo subastadas y alcanzan precios exorbitantes, llegando a alcanzar hasta un millón de dólares debido a la extraordinaria demanda. Además, la Autoridad del Canal otorga prioridad en estas reservas a sus clientes principales.
Como resultado, se ha formado una extensa cola de barcos, entre los cuales se encuentran los que transportan cosechas de granos, incapaces de asegurar una reserva anticipada debido a la irregularidad de sus calendarios.
Para eludir la espera de hasta tres semanas para cruzar el canal, algunos barcos que llevan cosechas desde América hacia Asia están optando por rutas más extensas, lo cual implica mayores costos. Estos gastos adicionales de transporte podrían disminuir la demanda mundial de maíz y soja provenientes de los proveedores estadounidenses, quienes ya han perdido participación en el mercado ante Brasil en años anteriores, según lo reportado por la agencia.
Los expertos han advertido
que las restricciones podrían continuar dificultando los envíos de granos hasta
el año 2024, momento en que la temporada de lluvias en la región podría empezar
a llenar los embalses y normalizar los envíos para abril o mayo.