García Linera destaca que solo la unión entre Evo Morales y Luis Arce salvará al MAS
El exvicepresidente Álvaro García Linera (2006-2019)
advirtió sobre la necesidad de aplicar "una dosis de pragmatismo"
entre Evo Morales y el actual mandatario Luis Arce para evitar posibles
"tragedias" o "catástrofes" dentro del oficialista
Movimiento al Socialismo (MAS), que podrían resultar en la pérdida del poder en
las elecciones presidenciales de 2025, informa Correo del Sur.
García Linera sostuvo en una entrevista con EFE que
"si no hay esta dosis de pragmatismo" la "división" y la
"guerra interna" en el MAS conducirá a la presentación de dos
candidaturas separadas (la de Morales y Arce) que traerá "la derrota del
proyecto indígena y de plurinacionalidad" en Bolivia.
"Electoralmente sería una derrota inevitable. No hay
manera de que el MAS gane dividido en dos, no hay manera", enfatizó quien
fue vicepresidente durante el Gobierno de Morales.
La fractura en el MAS comenzó a fines de 2021 cuando
Morales pidió que Arce haga cambios en su gabinete, algo que el mandatario
ignoró, a lo que siguieron acusaciones de corrupción y traición entre los
partidarios del exgobernante, "evistas", y quienes respaldan al jefe
de Estado, "arcistas".
Esa tensión también empujó a los partidarios de ambos
líderes a proclamarles como candidatos, aunque esto todavía debe definirse en
las primarias previstas para fines de este año.
"El riesgo de perder el poder"
García Linera dijo que solo "un hecho superior"
como el "riesgo a de perder el poder puede gatillar una dosis de lucidez
histórica" en Morales y Arce, y que el MAS afronte unificado los próximos
comicios.
El exvicepresidente adelantó que la "batalla"
interna continuará en los siguientes meses puesto que, inclusive, "está en
marcha la idea de proscribir al MAS (o) de hacer otro MAS", lo que a su
juicio significaría entregar el Gobierno.
"Espero que ante la inminencia de que van a perder el
poder haya una epifanía, a modo de un rayo en cielo despejado, que lleve a
estos dos compañeros (Morales y Arce) a entender que no deben perder el
poder", insistió.
García Linera expresó su esperanza en que esa unidad se dé
"hasta el último día" de la inscripción de candidaturas que se prevé
sean a mediados de 2025 y que hasta entonces queda "soportar un año de
puñaladas internas y socavamientos", añadió.
"Si es que no reconstruyen una fusión, una
unificación, una reorganización, y (no) se presentan unidos en 2025 esto, es
una tragedia" para el MAS, agregó el exvicepresidente.
Un presidente indígena
García Linera afirmó que "no" es neutral en la
pugna interna en el MAS, sino que cree en una "plurinacionalidad más
profunda" con un "candidato indígena" para las próximas
presidenciales.
"Evo (Morales) u otro, puede ser, pero indígena",
remarcó.
El exvicepresidente reconoció que Morales no tiene la misma
fuerza que cuando fue presidente, pero que aún "puede ser la unidad de lo
popular", aunque es un proceso que "hay que construirlo".
Ante la ausencia de otros líderes indígenas, "la
figura que queda hoy por hoy es Evo", es el líder indígena "más
fuerte", pero que "no tiene la fuerza" de los años anteriores,
insistió.
Aunque también está posibilidad de que en este tiempo
aparezca otro liderazgo indígena carismático, matizó.
Sobre el presidente Arce, García Linera dijo que "él
es una casualidad temporal de la historia" o "un pequeño recodo en el
camino" y que "tiene que saber cuál es su lugar".
El año pasado, la fricción en el MAS se intensificó luego
de la realización de un ampliado que reeligió a Morales como presidente del
partido y "candidato único" para los comicios de 2025, aunque el
organismo electoral declaró nula la reunión y pidió que se haga una nueva
asamblea.
La reciente crisis en la Justicia por la postergación de
los comicios judiciales y la ampliación del mandato de los magistrados de los
principales tribunales del país, ha abierto un nuevo enfrentamiento en el
oficialismo, pues el bloque de Morales acusa al Gobierno de Arce de influir en
algunos fallos y sentencias.