El fiscal general del Estado, Juan Lanchipa, negó haber detenido la investigación contra el expresidente Evo Morales por una denuncia de estupro, y atribuyó a la exfiscal departamental de Tarija, Sandra Gutiérrez, actos de “negligencia” en la gestión del caso. Según Lanchipa, esta fue la razón principal para su destitución.

En una declaración leída ante la prensa, Lanchipa afirmó que nunca ordenó paralizar el proceso y explicó que, en lugar de eso, formó una comisión de fiscales especializados en delitos de género para apoyar y fortalecer la investigación. Resaltó que el objetivo era garantizar que las pesquisas se realizaran respetando el debido proceso y sin revictimizar a las personas involucradas. Además, reveló que la denuncia se basa en un informe de inteligencia policial fechado el 25 de septiembre de 2024.

Lanchipa también precisó que las órdenes de aprehensión emitidas en el caso no fueron anuladas por el Ministerio Público, sino por una jueza, quien declaró su nulidad tras advertir la violación de derechos fundamentales de las partes involucradas. Según el fiscal, esto evidenció una conducta negligente por parte de Gutiérrez, quien tenía la obligación de supervisar adecuadamente las investigaciones para evitar errores procesales.

Por su parte, Gutiérrez denunció públicamente que Lanchipa le exigió que presentara su renuncia en 20 minutos, lo cual ella rechazó. Según su relato, al llegar a la Fiscalía, no le permitieron acceder a su oficina, tratándola, según sus palabras, "como si fuera una delincuente".

Finalmente, Lanchipa defendió su gestión al frente del Ministerio Público, destacando que, en sus casi seis años en el cargo, la institución ha actuado de manera efectiva y ética en casos de relevancia nacional, siempre respetando el principio de objetividad, sin importar quién esté involucrado.