Uso de tarjetas en el exterior: ¿un asunto nacional o internacional?
Recientemente, se han publicado afirmaciones
indicando que la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) habría
"convalidado" límites impuestos por los bancos al uso de tarjetas en
el extranjero. Este argumento, si bien puede parecer intuitivo, adolece de una
comprensión profunda del alcance y las funciones de la ASFI.
La ASFI es una institución gubernamental
encargada de regular, controlar y supervisar los servicios financieros en
Bolivia. Su principal objetivo es garantizar la estabilidad y el buen
funcionamiento del sistema financiero, protegiendo los intereses de los
consumidores financieros y contribuyendo al desarrollo económico del país. Su
ámbito de acción se circunscribe al territorio boliviano y a las instituciones
financieras que operan bajo su jurisdicción.
La Autoridad de Supervisión opera bajo el
marco legal establecido por la Constitución Política del Estado y
principalmente por la Ley N° 393 de
Servicios Financieros. Esta normativa detalla las funciones,
atribuciones y responsabilidades de la ASFI, así como los derechos y
obligaciones de las entidades financieras y de los consumidores de servicios
financieros. Por to tanto, esta entidad no podría emitir normativa aplicable en
otros países.
Se entiende que las operaciones de pago,
transferencias de fondos y retiro de efectivo en el exterior con tarjetas están
normadas por los emisores de las mismas, quienes, en el marco de sus políticas internas,
fijaron límites para cubrir gastos de la operativa internacional con sus
corresponsales en el exterior. Dada la elevada cantidad de operaciones que
extrañamente se generaron en los últimos meses y los controles impuestos, también
están dirigidos a evitar la legitimación de ganancias ilícitas y dar
cumplimiento a los estándares internacionales determinados para este tipo de
comportamientos por el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI).
ASFI habría detectado un incremento
exponencial, en el uso de tarjetas de crédito en el exterior, tanto en
establecimientos comerciales como en cajeros automáticos. Si bien los usuarios
tienen derecho a disponer de sus fondos, es muy probable que una parte
significativa de estas operaciones esté orientada a la adquisición de dólares
estadounidenses con el fin de introducirlos al mercado nacional y
comercializarlos a precios superiores a los oficiales, generando de esta manera
agio y especulación con la
divisa norteamericana.
El objetivo primordial de las medidas
adoptadas y aplicadas por ASFI es resguardar la estabilidad del sistema
financiero y proteger los intereses de los consumidores financieros. La
creciente demanda de dólares a través de tarjetas de crédito en el exterior
representa una amenaza para la economía, por la venta de divisas en el mercado
paralelo a precios superiores a los establecidos por el ente emisor. Esta
situación no solo perjudica al consumidor al generar escasez y volatilidad en
el tipo de cambio, sino que también debilita la economía nacional.
La especulación cambiaria socava la estabilidad
financiera y económica de nuestro país, impactando negativamente en el bolsillo
de los bolivianos. Es necesario tener una actitud propositiva ante las medidas
regulatorias y políticas macroeconómicas aplicadas que se están asumiendo en
defensa de la economía boliviana.
Ximena
Rodríguez