Pepe Mujica: “Bolivia, Argentina, Chile y Perú tienen que defender el litio”
José
"Pepe" Mujica es un personaje de la historia contemporánea que se
describe como luchador social y político. A él lo consultan correligionarios,
periodistas e intelectuales que lo visitan en su casa en Montevideo, y también
es un asiduo visitante de Buenos Aires. El expresidente uruguayo llegó a la
capital argentina acompañado por Lucía Topolansky, ex vicepresidenta. Recibe a
PáginaI12 en la casa de la excónsul Lilian Alfaro, en el barrio de Colegiales,
luego de haber conversado con Álvaro García Linera.
El
histórico referente del Frente Amplio siempre tiene a mano alguna palabra
campechana, que brota de su vida en la chacra y de mucho antes de ser
guerrillero tupamaro, cuando a los 14 años vendía flores para ayudar a su mamá.
Mujica habla de la crisis del Estado-nación, de los cantos de sirena que escucha un votante desesperado y del antídoto que encontró para nuestros pueblos: la integración. "Argentina, Chile, Bolivia y Perú se tienen que juntar y establecer una política común para defender el litio", sostiene. El veterano político de izquierda, ávido lector, está estudiando hace meses la historia de China y las ideas de Confucio, consciente de la importancia geopolítica que tiene el gigante asiático.
-
¿CÓMO SE LOGRA UNA INTEGRACIÓN REGIONAL SI CADA PAÍS ESTÁ LIDIANDO CON
TORMENTAS INTERNAS?. LULA DA SILVA, A LA
SEMANA DE ASUMIR, SUFRIÓ UN INTENTO DE GOLPE; EN CHILE, LA ULTRADERECHA QUEDÓ A
CARGO DEL PROCESO CONSTITUYENTE...
- No
veo la integración para mañana. Estoy pensando en 25, 30 años. Tenemos que
aprender a soportarnos, de izquierda o de derecha. Tenemos que aprender a
cooperar para poder competir con el mundo. Si nos entramos a plantear en
términos de derecha o izquierda, nos vamos a juntar en el año del golero.
Tenemos que juntar intereses y defenderlos. Las cumbres son aspamento. Hay que
construir otras cosas lentamente.
-
¿ESTÁ DE ACUERDO CON QUE SE IMPULSE UNA MONEDA COMÚN?
- Sí,
a largo plazo. Antes tenemos que empezar a comerciar con las monedas perchentas
que tenemos y que los bancos centrales hagan el arbitraje. Y si no podemos
hacerlo con las monedas, hacer trueque de valor. No depender de monedas que son
de otro lado. Tenemos que uniformizar las exigencias de aduana que tenemos para
los alimentos, tener los mismos parámetros en toda América para facilitarlo.
Debemos construir actividades complementarias: nosotros no vamos a tener
industria automotriz, podemos hacer pastillas de freno. Pero para eso tenemos
que tener seguridad de que nos la compran. Y dar la seguridad que le compramos,
y no comprar autos a Corea. Debemos juntar nuestras universidades, no puede ser
que un ingeniero argentino no pueda ir a trabajar a Uruguay o a Brasil.
¡Estamos locos!. Nos captan la inteligencia Europa o EEUU. Tenemos que empalmar
nuestras energías eléctricas en todos los circuitos de frontera, empalmar
nuestros servicios de salud para ciertos tipos de enfermedades, bancos de
órganos; tenemos que tener un mecanismo propio. La integración es una política
de largo plazo. Con nombre, símbolo y una fecha, para que todas las escuelas de
nuestra América latina enseñen que por encima de los países componemos una
comunidad con intereses comunes del Río Bravo a Tierra del Fuego. Tenemos el
día de la secretaria y no tenemos un dia en el que celebremos la colectividad
latinoamericana. En la enseñanza tiene que estar el portugués y en Brasil, el
castellano. Entendernos entre nosotros. No es mágico, hay que construirlo. Si
vamos a una conferencia internacional, primero tenemos que hablar entre
nosotros y llevar una posición conjunta. Si un latinoamericano se promueve para
algo lo tenemos que respaldar entre todos. No ser carneros, ¡que nos pisamos la
manguera!.
Hay
cosas que son trascendentes, como el litio. Creo que Argentina, Chile, Bolivia
y Perú se tienen que juntar y establecer una política común para defender el
mineral y no dejarse currar. Tener una política común. No importa si el
gobierno es de izquierda o de derecha, le tiene que dar valor. No cometer
errores históricos. Hay que juntarnos para defendernos, no para competir.
Juntar la investigación, las universidades, se necesita voluntad política para
eso. Ya tenemos el Banco de Desarrollo de América Latina en Montevideo y está
funcionando.
“URGENTE
FORTALECER EL MERCOSUR Y LA UNASUR”
-
¿ENTONCES APUESTA A FORTALECER EL MERCOSUR Y LA UNASUR?
- Por
supuesto, y hay que desarrollar los circuitos de economía complementaria. Que
los países más chicos intervenimos en cosas pequeñas que sirven para nutrir las
cadenas industriales de cosas más complejas de países más grandes. Pero a su
vez compramos. Nosotros podemos fabricar algunas cosas para Argentina y Brasil,
pero tenemos que comprarles después, que nos unan los intereses. Hay que ganar
y ganar.
- EL
27 DE JUNIO SE CUMPLEN 50 AÑOS DEL GOLPE DE ESTADO EN URUGUAY. ¿CUÁL ES SU
REFLEXIÓN A PARTIR DE SU PROPIA HISTORIA?
- Son
50 años donde una sociedad trata de construir su destino y padece los problemas
de una larga dependencia. Nosotros somos descendientes de dos países feudales,
que logramos la independencia política pero pagamos con el precio de la
dependencia económica y cultural. Y estamos luchando por ser nosotros mismos.
Hemos padecido la historia. Somos países muy jóvenes. Hace unos meses que estoy
estudiando la historia de China, son 5000 años de historia no escrita y 5000
años de historia escrita. Y tenemos que lidiar con ese mundo que se nos viene
encima.
-
¿CREE QUE FALTA AVANZAR MÁS EN MEMORIA, VERDAD Y JUSTICIA?
-Sí,
se ha avanzado poco. Hay un pacto de silencio de los militares y de la sociedad
civil también. Tenemos que crear las condiciones materiales, espirituales e
ideológicas para sostener el nunca más.
REFERENCIA
INELUDIBLE DEL PROGRESISMO LATINOAMERICANO
Referencia
ineludible para el progresismo latinoamericano, José "Pepe" Mujica. A
pesar de su longevidad, el exmilitante tupamaro decidió volver al ruedo
electoral en 2019 y arrasó en los comicios en los que se postuló al cargo de
senador por el centro-izquierdista Frente Amplio. Esas elecciones, sin embargo,
significaron el fin de 15 años ininterrumpidos de su espacio político: en las
presidenciales triunfó Luis Lacalle Pou gracias a una alianza de distintos
espacios de derecha.
Promediando
la década de los sesenta, Mujica se unió al Movimiento de Liberación
Nacional-Tupamaros (MLN-T). Por su militancia de izquierda, cayó preso cuatro
veces y, en dos oportunidades, se fugó de la cárcel montevideana de Punta
Carretas. En total, el expresidente pasó casi quince años de su vida en
prisión. Fue uno de los dirigentes tupamaros que la dictadura cívico-militar
tomó como "rehenes", presos e incomunicados que eran trasladados a
cuarteles de todo el interior del Uruguay,