Por efectos de la sequía, Anapo anuncia disminución de 600 mil toneladas de soya y menores ingresos de divisas
La Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) advirtió una baja en la producción de soya en el orden de 600 mil toneladas de soya correspondiente a la campaña de verano 2023-2024, debido a los efectos de la prolongada sequía que se registra desde noviembre del año pasado.
Indicó que la falta de lluvias se extendió incluso hasta fines de enero y esta situación ha permitido cubrir solamente el 90%. La proyección inicial era llegar a 1,2 millones de hectáreas sembradas, según declaró el presidente de Anapo, Fernando Romero.
No obstante, esa dificultad, la Anapo garantiza el abastecimiento del mercado interno para los sectores pecuarios que solamente demandan un 20% de la producción. Sin embargo, prevén una merma en los excedentes destinados a las exportaciones en grano, harina y aceite, por tanto, menos ingreso de divisas al país.
Señaló que aún se puede alcanzar una producción de al menos 1,7 millones de toneladas de grano de soya, aunque depende de la provisión de suficiente diésel para garantizar la cosecha en el momento oportuno.
Reafirmó que para elevar la producción es importante avanzar con la biotecnología, sobre todo hacia la aprobación del evento en soya HB4 con tolerancia a sequía, para ayudar a que los productores mitiguen sus pérdidas por esta adversidad climática.
Explicó que las principales zonas afectadas son los municipios de Pailón, Cuatro Cañadas y San Julián, que representan el 50% de la superficie sembrada en la campaña de verano 2023-2024.
Romero estimó en casi 500 mil hectáreas afectadas y/o perdidas y eso implica una disminución importante en el rendimiento y la producción de soya, comentó en una nota de prensa oficial.