La compañía prescindió de la trabajadora para aplacar un escándalo originado por la detención arbitraria de dos jóvenes negros en el local donde trabajaba, según un jurado federal

Starbucks despidió en 2018 a una exdirectora regional de la compañía debido al escándalo desencadenado por la detención de dos hombres negros en uno de sus locales en Filadelfia. Según un jurado federal de Nueva Jersey, la cadena de cafeterías ha sido condenada a indemnizar a la exempleada con 25,6 millones de dólares (25 millones por daños y 600.000 por perjuicios). El incidente ocurrió en abril de 2018, dos años antes de que la muerte de un afroamericano en Minneapolis desencadenara una ola de protestas contra el racismo en Estados Unidos y en el mundo.

La secuencia de eventos fue la siguiente: dos jóvenes negros ingresaron a un local para una reunión de negocios con un hombre blanco. Mientras esperaban, uno de ellos solicitó usar el baño, pero se le negó y se les pidió a ambos que abandonaran el lugar antes de realizar un pedido. Ante su negativa, un empleado llamó a la policía y los dos hombres negros fueron detenidos. Las imágenes del arresto, grabadas por testigos con sus teléfonos móviles, se volvieron virales en todo el país, generando acusaciones de racismo y amenazas de boicot contra la cadena. Este incidente sumió a una de las marcas más reconocidas de Estados Unidos en una crisis de imagen, agravada por su resistencia a permitir la sindicalización de sus empleados.

A medida que las imágenes de la detención se difundieron, el CEO de la empresa se disculpó públicamente y calificó el trato dado a los hombres como "reprobable". Starbucks decidió cerrar temporalmente sus 8.000 locales para proporcionar capacitación sobre prejuicios raciales a sus empleados. Sin embargo, en un intento por controlar los daños a su reputación, Starbucks decidió despedir a Shannon Phillips, quien era directora gerente de varios locales en Filadelfia, Delaware y partes de Maryland, y había sido ascendida seis años antes.

El jurado determinó que Starbucks violó los derechos civiles federales de Phillips y una ley de Nueva Jersey que prohíbe la discriminación racial. El fallo concluyó que la compañía la despidió por ser blanca y debido a las repercusiones del caso de Filadelfia. Phillips afirmó que la empresa intentó castigarla a ella y a otros empleados blancos, incluso a aquellos que no estuvieron involucrados en el incidente que llevó a llamar a la policía, a pesar de sus esfuerzos por minimizar el impacto de las protestas en el local. Según su testimonio, recibió una orden falsa de parte de una de sus superiores, una persona de raza negra, para suspender a un gerente blanco de otro local de la ciudad por supuesta conducta discriminatoria.

La empresa, que durante el juicio negó haber despedido a Phillips por su raza y afirmó que fue debido a su "respuesta insuficiente" al incidente, optó por no comentar sobre el fallo. Phillips afirmó que fue despedida un mes después de rechazar la orden de suspender al gerente blanco, sin haber recibido previamente quejas sobre su desempeño laboral. La abogada de Phillips argumentó que otro gerente del local, de raza negra, que ascendió al empleado que llamó a la policía, no enfrentó ninguna medida disciplinaria. La empresa justificó el despido de Phillips como una "situación irrecuperable". Sin embargo, según la demanda, la medida disciplinaria de Starbucks buscaba "convencer a la comunidad de que había respondido adecuadamente al incidente".

Los jóvenes involuntariamente implicados en el incidente, quienes tenían 23 años en ese momento, llegaron a un acuerdo económico confidencial con Starbucks y obtuvieron el compromiso de la ciudad de Filadelfia de invertir 200.000 dólares en apoyo a jóvenes emprendedores.

Por diversas razones, la cadena global de cafeterías, que es omnipresente en las ciudades de Estados Unidos, ha estado bajo escrutinio. La movilización sindical de los trabajadores en cientos de locales alertó a la compañía, que temía el impacto negativo en sus intereses, como el aumento de los costos laborales. No es la única gran empresa que ha ejercido presión para desalentar la organización sindical de sus empleados, según la Junta de Relaciones Laborales.

En el marco de las celebraciones del Orgullo, el sindicato de trabajadores anunció este martes que la empresa ha prohibido decorar varios de sus locales con motivos del Orgullo LGTBI. El sindicato Starbucks Workers United afirmó en Twitter: "En pleno mes del orgullo (gay en Estados Unidos), Starbucks ha prohibido las decoraciones del Orgullo en las tiendas de todo Estados Unidos". Un portavoz de la empresa negó categóricamente la prohibición, en un contexto de acoso a las empresas arcoíris en el país.Este martes, en el marco de las celebraciones del Orgullo, el sindicato de trabajadores anunció que la empresa ha prohibido decorar varios locales con motivos LGTBI. “En pleno mes del orgullo (gay en Estados unidos), Starbucks ha prohibido las decoraciones del Orgullo en las tiendas de todo Estados Unidos”, aseguró el sindicato Starbucks Workers United en Twitter. Un portavoz de la empresa negó tajantemente la prohibición, en un contexto de acoso a las empresas arcoíris en el país.