En el tercer día de bloqueo en Yapacaní, los camioneros varados, sin acceso a comida, agua ni baños, piden una pausa temporal en el bloqueo
Cientos de
camiones de transporte nacional e internacional se encuentran varados en ambos
lados de la carretera Santa Cruz - Cochabamba, a la altura del ingreso a Campo
Víbora, debido al bloqueo indefinido que cumple hoy su tercer día. Los
comunarios de la zona exigen a la Cámara de Diputados la aprobación de un
proyecto de ley que viabilice la construcción de una carretera que beneficie a
la región.
Cientos de
kilómetros de filas
La imágene muestran
filas de camiones que se extienden por varios kilómetros en ambos lados del
punto de bloqueo. Los transportistas, principalmente del sector pesado, han
expresado su preocupación por la falta de acceso a servicios básicos como baños
y duchas, además de la escasez de alimentos y agua potable.
Muchos de los
conductores varados han agotado sus viáticos y no tienen recursos para
subsistir mientras dure la medida de presión. Algunos han optado por instalar
pequeñas trancas para pedir apoyo a los vehículos pequeños que circulan por la
zona, mientras que otros han buscado alojamiento en comunidades cercanas como
Puerto Abaroa, Nuevo Horizonte y San Germán.
Cisternas con
combustible varadas
Entre los
vehículos varados solo del lado de Santa Cruz a Cochabamba se encuentran más de
15 cisternas con combustible, 10 de ellas provenientes de la planta de Sica
Sica en Arica, Chile, y las 5 restantes desde la refinería de Palmasola con
destino a La Paz.
Los
comunarios exigen la construcción de una carretera
La medida de
presión fue iniciada por comunarios del municipio de Yapacaní, quienes exigen
la construcción de una carretera de 31 kilómetros que beneficiaría a más de 85
comunidades dedicadas a la producción agrícola, ganadera, piscícola y
petrolera. El proyecto tiene un costo total de $us 35 millones y sería
financiado por la CAF.
Wilder
García, secretario general de los Interculturales, advirtió que los comunarios
no darán cuartos intermedios y que, de no aprobarse el proyecto de ley, tomarán
medidas más drásticas como la toma de pozos petroleros e incluso el cierre de
las válvulas de YPFB Yarará XI./ EL DEBER