De acuerdo con el primer análisis realizado por la estatal Navegación Aérea y Aeropuertos Bolivianos (Naabol), se presume que el ingreso de la jauría de perros a la pista del aeropuerto Internacional de El Alto, la noche del martes, fue por los predios de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB).

El director de Naabol, Elmer Pozo, explicó que la mañana de este miércoles personal de esa entidad y de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) realizaron una inspección por el área perimetral del aeropuerto en predios administrados por Naabol y no se encontró ninguna abertura por donde hayan ingresado a la pista.

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“Hemos ido al sector a verificar personalmente, o por qué lugares hubiesen ingresado al aeropuerto; se hace un análisis en los predios de la Fuerza Aérea que presuntamente vemos que habrían ingresado por ahí los cachorros”, indicó Pozo en conferencia de prensa.

Durante la mañana de este miércoles, Pozo y el director de la DGAC, Iván García, realizaron un recorrido por la malla perimetral y en el umbral 1-10 donde existirían escombros, pero se evidenció que no hay espacios para el ingreso de animales. “Está perfectamente el muro perimetral y que no han ingresado por ahí los perros”.

Según el reporte preliminar, uno de los canes (una hembra) estaba en celo, situación que originó que otros perros estuvieran tras de ella e ingresaran a la pista de aterrizaje.

Pozo añadió que Naabol invirtió más de medio millón de bolivianos para reconstruir la malla perimetral del aeropuerto de El Alto.

Suceso

Cerca de las 21.30 del martes, un avión de la aerolínea estatal Boliviana de Aviación (BoA) impactó con una jauría de perros en la pista del aeropuerto de El Alto, accidente que ocasionó la demora de los vuelos.

La aeronave CP-3138, que iba de La Paz a Cochabamba, se aprestaba al despegue. El impacto con los animales causó daños en el tren de aterrizaje y la muerte de los canes.

García explicó que, una vez conocido el hecho, se aplicaron los protocolos de seguridad y no se registren incidentes mayores con los pasajeros y la tripulación de la aeronave.

“Naabol cumple con un protocolo cuando se suscitan estos eventos, tanto la tripulación ha actuado en un abortaje (sic) de despegue; para eso, los tripulantes son instruidos, habilitados y es parte de su proceso de entrenamiento en los simuladores”, explicó.

El hecho ocasionó daños menores en la aeronave en el tren principal y otros problemas en las conexiones eléctricas.