Bernardo Arebalo, presidente electo de Guatemala

El presidente electo de Guatemala exigió la renuncia de la fiscal general por orquestar un golpe de estado en su contra

El presidente electo de Guatemala, Bernardo Arévalo de León, pidió quitar la inmunidad a la fiscal general y a un juez por supuestas ilegalidades al allanar y abrir cajas donde se resguardan las papeletas de votación de las elecciones generales del 25 de junio.

Las solicitudes para levantar los fueros a la fiscal general Consuelo Porras y el juez Fredy Orellana fueron presentadas la noche del martes en la sede Corte Suprema de Justicia (CSJ) en la capital guatemalteca, según el recurso legal.

Además, Arévalo presentó una denuncia penal contra los fiscales Rafael Curruchiche y Cinthia Monterroso, ambos de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), la unidad que emprendió una cruzada contra los resultados electorales.

El ex diputado resultó ganador en la segunda vuelta del 20 de agosto, tras dar la sorpresa en junio pues no figuraba como favorito en una veintena de candidatos.

Arévalo la noche del martes exigió la renuncia de los cuatro funcionarios por orquestar un supuesto plan de golpe de Estado y anunció que presentaría las querellas.

La denuncia precisa que buscan retirarles la inmunidad para que sean investigados por la posible comisión de seis delitos, entre ellos violación a la Constitución, incumplimiento de deberes, abuso de autoridad con propósito electoral y prevaricato.

El allanamiento generó una oleada de críticas y rechazo por parte de actores internacionales como Estados Unidos, la Unión Europea y la OEA.

Por su parte, Arévalo afirmó el martes que suspendió momentáneamente el proceso de transición con el actual Gobierno, de Alejandro Giammattei, tras las acciones del Ministerio Público (Fiscalía) contra los comicios.