A solo un día de la Nochebuena, los mercados de las principales ciudades del eje central del país—Santa Cruz, Cochabamba y La Paz—registran un incremento significativo en el precio del kilo de carne de pollo. Este fenómeno, recurrente durante las fiestas de fin de año, adquiere este año una dimensión histórica, particularmente en Santa Cruz, donde el precio alcanza los Bs 23 por kilo, según informaron los comerciantes.

Recorrido por los mercados

Cochabamba

En el centro de abasto Pulacayo, el precio del pollo varía entre Bs 22 y Bs 23, dependiendo de si incluye o no menudo. Este lunes, una comerciante expresó su descontento: “Está demasiado caro, exagerado diría yo. No nos dan ninguna explicación, llega nomás con ese precio. Cada día le suben un peso”. Además, otra vendedora admitió que la demanda ha disminuido debido al alto costo. En tiempos normales, el precio del pollo en Cochabamba ronda los Bs 15 o 16.

La Paz

En el mercado Rodríguez, el precio del pollo oscila entre Bs 21,50 y Bs 22. Uno de los comerciantes atribuyó el incremento a una reducción en la oferta: “No está llegando la misma cantidad de producto como en otras épocas. Presumimos que esta es la razón del aumento”. Además, indicó que la escasez de insumos como soya, garbanzo y maíz, alimentos básicos para los pollos, también contribuye a esta situación. En años anteriores, el precio promedio era de Bs 16.

Santa Cruz

En el mercado antiguo Abasto, el kilo de pollo se comercializa actualmente a Bs 23, una cifra que contrasta drásticamente con los Bs 11 registrados en noviembre tras el levantamiento de los bloqueos evistas. Durante el año, el precio promedio fluctuó entre Bs 13 y Bs 16.

Factores que influyen en el alza

Los vendedores señalan que la escasez de insumos básicos para la alimentación de las aves, así como una menor disponibilidad de producto en los mercados, son las principales causas del incremento de precios. Además, las fiestas de fin de año generan una mayor demanda, lo que también incide en los costos.

Impacto en los consumidores

El alza en el precio del pollo está afectando el poder adquisitivo de las amas de casa y otros consumidores, quienes en muchos casos optan por reducir su compra o buscar alternativas más económicas. A medida que se aproximan las celebraciones masivas de fin de año, esta situación representa un desafío tanto para los comerciantes como para los compradores.